Marruecos, la Búsqueda (3): Gargantas del Dades (un fotorrelato)
Esa tarde, Tinghir se veía poderosamente naranja en contraste con el gigantesco palmeral, el cual la atravesaba en dos como una verde y brillante ría.
"El arte y el viaje inventan una forma de ver el mundo"
Esta es la parte donde pondré mis ideas, propuestas y experimentos creativos viajeros: ¿quién sabe? quizá museos urbanos, juegos de pistas viajeros, viajes cantados, lugares reinventados, formas alternativas de explorar un lugar… Es la parte más espontánea, mágica e impredecible del Viaje… por eso quizá es mi preferida.
Esa tarde, Tinghir se veía poderosamente naranja en contraste con el gigantesco palmeral, el cual la atravesaba en dos como una verde y brillante ría.
Ahora ya lo sabíamos: lo que estábamos buscando no se encontraba en Ait Benhaddou. La mirada de Juan se perdía en el horizonte, desde el
“Iréis a Marruecos, a Marrakech y lo encontraréis cuando él quiera ser encontrado.” Las palabras del amigo de Juan no podrían haber sido menos esclarecedoras.