«VIAHIPPIES» ¿la nueva CONTRACULTURA?

Última actualización 17/12/2019 por Dani Keral

Algo está cambiando a nuestro alrededor. Y tiene que ver con los viajes, con los VIAHIPPIES .

Los humanos estamos cogiendo conciencia de que el mundo es grande, las ganas de recorrerlo infinitas… y el tiempo muy limitado.

Y eso nos está llevando a hacer algo que, cada vez, observo que ocurre con más frecuencia a mi alrededor: dejarlo todo y salir a cumplir ese sueño, a priori, inalcanzable según los canones del mundo que habitamos. 

 Amigos cercanos, como Alba Luna; Manuel de El mundo viajero; Almu , Ori, Miguel de la Vuelta a la Tortilla; Valen y Alex de Puentes en el Aire; Patri la Oveja Negra Viajera; Alberto de Con un par de botas se han lanzado a ello. Otros están de camino como Pepa de Viajes Terapéuticos y otros, tarde o temprano, entenderán que es lo que su interior les está pidiendo que hagan  (me vienen nombres como Patri la Cosmopolilla y David e Irene de Tragaviajes). 

Pero empecemos por orden.

¿Qué es la contracultura?

Theodore Roszak escribió en 1968 la siguiente explicación de contracultura: los «valores, tendencias y formas sociales opuestos a los establecidos en una sociedad».

Siguiendo esto, movimientos de contracultura fueron la generación Beat estadounidense en los años 50, el movimiento hippie en los 60, la movida madrileña en los 70-80… Incluso el romanticismo lo fue a finales del siglo XIX frente al racionalismo imperante. 

Portada-artículo-beat

Todos ellos tenían un patrón común: un sentimiento inconformista, opositor a los principios culturales predominantes en la sociedad en la que surgieron y que iban «a la contra» de estos.

Esta actitud rebelde provocaba, a su vez, la aparición de una «nueva» cultura, o subcultura, con sus propias características y matices.

Gracias a estos movimientos de contracultura se lograba evidenciar defectos de la cultura predominante, defectos que eran claramente «atacados» por los defensores del nuevo movimiento, consiguiendo así una llamada a la conciencia de la población en general.

Los movimientos de contracultura no conseguían (ni buscaban) explicar totalmente el mundo por sí mismo si no cambiar para sus vidas esas cosas incorrectas del funcionamiento general de este.

¿Es VIAJAR la nueva Contracultura? Los Viahippies

Bien, pues con todo esto que hemos dicho de los beat, los hippies etc…

¿Son los viajeros (los que deciden romper con todo y salir a por su sueño) los nuevos Kerouak o Jimi Hendrix?

¿Ha ido naciendo el movimiento VIAHIPPIE?

VIAHIPPIES CON NOMBRE

Pues, sospechosamente, hay cosas muy similares

  1. En primer lugar, son personas inconformistas, que no están a gusto con lo que están viviendo (sus trabajos, sus ritmos continuos, año tras año)… y se lanzan a romperlo viviendo 365 sábados viajando , saltando por todos los rincones del mundo o diciendo que ahora toca viajar.
  2. Son personas rebeldes, personas que detectan el mal funcionamiento de algunos parámetros con los que se mueve el mundo (no eres dueño de tu tiempo, tu tiempo tiene que estar al servicio de lo que dicta la sociedad), y los tratan de romper y evidenciar ante el resto de personas para que estas se den cuenta como ya hizo Antonio Gé de Inteligencia Viajera en este genial artículo donde te reta a no ser tú quien muera a los 25.
  3. Los viahippies son personas con una idea muy clara: el mundo en el que se mueven no les hace sentir a gusto, no les representa, por lo cual se crean su propio mundo, sus propias reglas y lo plasman en forma artística como  «los lunes no existen» de Lucía y Rubén de Algo que recordar .Los lunes no existen
  4. Son lo suficientemente numerosos como para generar una masa crítica para que el movimiento incremente y perdure en el tiempo, pero no lo suficientemente grandes  (de momento) como para que no pasen de ser una subcultura.
  5. Son mirados con recelo por el resto, vistos como «raros», pero en cierta forma, también envidiados por la revolución que son capaces de hacer con sus vidas.  

Pero… ¿quiénes son los Kerouac que empezaron con todo esto?

Es complicado citar nombres en particular para llamarlos los  iniciadores del «movimiento», puesto que es complicado decir incluso cuándo empezó este movimiento (al menos en el mundo hispano, que es el que más conozco) pero, desde mi conocimiento,  podría citar a algunos Grandes Viajeros que, a comienzos de los 2000 (el punto quizá de inflexión a partir del cual más gente empezó a actuar de la misma forma) hicieron lo que ahora se está atreviendo a realizar cada vez más gente. Citaría a:

  • La familia Zapp, que se lanzaron a la aventura en el año 2000 en un coche de los años 20.
  • Pablo Rey y Ana Callau, viajeros 4x4x4, la Vuelta al mundo en X años, que iniciaron su, aun todavía vuelta al mundo, también en el año 2000.
  • Carme y Xavier de lavueltaalmundo.net, una pareja que en 2005 decidió salir de vuelta al mundo y desde entonces ya suman 3 en su currículum, a parte de haber cambiado radicalmente su estilo de vida. 
  • Carlos Olmo, el Vagamundos, que en el 2000 decidió que la cultura predominante del «trabajar un mucho y viajar un poco» no era la suya.
  • Pablo Strubell, que en 2005 decidió salir en busca de la ruta de la seda e Itziar Marcotegui, que se embarcó con él en un viaje por África de Cabo a rabo y ahora, juntos, llevan organizando ya años lo que sería el «Woodstock» de los viajes, las Jornadas de los Grandes Viajes.
  • Juan Pablo Villarino, Acróbata del camino, que también en 2005 comenzó su viaje a dedo sin fin por el planeta.
  • Vero Boned, Sin Mapa, decidió dejar su Buenos Aires a finales de los 90 decidió aparcar a medias sus estudios universitarios para salir a recorrer mundo. Desde entonces ha vivido en diferentes lugares del mundo y viajado a infinitos más. 
  • Iosu López, de Mochileros TV, que en 2006 recorrió América de punta a punta durante más de un año, y Alberto Menéndez, la otra mitad de Mochileros. 

Recientemente conocí a alguien que podría llamar «protoviahippie», Francisco Po, que dejó en el 78 su profesión para dedicarse a viajar y a escribir (y que ha publicado su primera novela este año, «Tras la estela de las montañas voladoras».)

Sin remontarnos tan atrás, también es justo y necesario citar a dos de las viajeras que han contribuído a construir este espíritu de los viahippies de contracultura, Aniko Villalba y Laura Lazzarino y a los ya citados Lucía y Rubén, de Algo que recordar, que lograron plasmar de otra forma artística  el sentimiento viahippie con su  ya archiconocido  corto el «Síndrome del Eterno Viajero«. 

(Si alguien cree que falta algún viajero, aportadlo en comentarios, jeje, esto es lo que yo conozco)

Todas estas reflexiones quizán no vayan a ningún lado, o quizá se conviertan en el comienzo del manifiesto de los Viahippies.

En cualquier caso es algo que cada vez voy observando mucho más.

A mi, personalmente me tocó en lo profundo, hace ya un año y medio cuando tomé la decisión de disponer de mi tiempo para dedicarlo a viajar y moverme a mi gusto. 

La forma en la que llegué a esa decisión fue gracias a unas instrucciones que yo mismo encontré. Unas INSTRUCCIONES PARA NO PERDERTE LA VIDA y que puedes ver pinchando aquí.

¿Pertenezco yo a los viahippies ? En unas cuantas cosas, ciertamente, sí. 

¿Y TÚ?

¿Es tu primera vez en el blog? ¿Quiéres saber qué es Un Viaje Creativo? ¡Pincha y te lo cuento!

Dani Keral

Redactor y fotógrafo en revistas Yorokobu , Revista Salvaje y Condé Nast Traveler ◆ Ganador en 2023 del I Premio Nacional de Periodismo en el Medio Rural Ainhoa Camino ◆ Finalista, en 2022, del XXXV Premio de Periodismo Turístico Mañé i Flaquer ◆ Premio Internacional de Comunicación Turística 2017 al mejor blog revelación de viajes ◆ Creador del podcast El Vuelo Sonoro de Radio Viajera ◆ Más info en mi perfil de LinkedIn

42 comentarios en ««VIAHIPPIES» ¿la nueva CONTRACULTURA?»

    • jajajaja, da para largo de hablar el tema y molaría mogollón hablarlo con una cerveza albana, jeje. Un abrazote a los dos!!!

      P.D: los post it también os echan de menos 😉

      Responder
  1. Muchas gracias por nombrarnos Dani. La verdad que parece que si no trabajas 10 horas al día en una oficina es como si no trabajaras, pero se ha demostrado que hay muchas maneras de hacerlo, lo que no se enseña es la manera de «echarle huevos» , espero aprender pronto a echarle eso y hacer pronto lo que tanto deseo hacer. Abrazos amigo

    Responder
    • jejejje, vas a acabar odiándome por insistirte tanto (aunque sí, esté escribiendo esto desde Aluche ;)… por el momento).

      Sé que lo vais a hacer. Con Patri lo veía venir de hace tiempo y ahora que se han alineado los astros para que lo haga, está ya ahí ahi a puntico de hacerlo. Y con vosotros me pasa lo mismo. Tengo poderes, my friend… pero lo que pasa es que no puedo decírselo a la gente 🙂

      Abrazote!!!

      Responder
  2. Salí hace siete años de ese calificativo tan trillado y conocido hoy como «círculo de confort», ahora vivo o viajando o viajo viviendo, la verdad es que con el tiempo uno se olvida que sigue de viaje.
    No sé si me he convertido en un viahippie, pero me noto cada más anarquista y anti-sistema, o quizás sea el sistema el que está contra mí. Y haciendo balance lo veo todo algo muy positivo.
    Muy buen post, Dani.

    Responder
    • Un auténtico placer leer tu comentario, Óscar. Sea o no con ese calificativo (que es, realmente solo eso, un nombre con el que poder calificar a un grupo de gente, como beatnik, hippie etc) la verdad es que, por lo que dices, te has reinventado de una forma genial y has conseguido mantenerlo en el tiempo, que es, sin duda, un paso complicado.

      Muchas gracias por los halagos y por pasarte por mi rincón!

      Responder
  3. Pero qué maravilla de post, por favor.
    La verdad es que pienso que tienes toda la razón, al principio yo entendí este patrón como una moda pero con el tiempo he visto que es mucho más que eso, y ya si nos dices que somos los nuevos Kerouac, cuidado que me lo creo <3
    Un gran abrazo amigo

    Responder
    • jajajja, sin duda, al principio parece una moda… pero a fin de cuentas como otros movimientos contracultura. Ahora os habéis convertido unos surcadores de cielos a lo «on the road». Y tan a gusto!!!

      Un abrazote Alex!!!!

      Responder
  4. Como siempre, un aporte genialmente distinto a algo que ciertamente se está convirtiendo en común. Gracias por la mención 🙂 aunque seguimos trabajando para desligarnos aun más de ese mundo del que los Viahippies han escapado ya, y aunque sí hemos iniciado el proceso, seguiremos trabajando para hacerlo más evidente y convertirnos en completos Viahippies! Jejeje
    Un abrazo Dani!

    Responder
    • Hola Vir!! Sí, vosotros lo hicísteis! Es complicado desligarse por completo a nivel físico, yo creo, pero es una desconexión más de ideología la que se produce en un movimiento contracultural y, las ideas, cuando cambian, ya significa que la persona se ha desligado Eso es lo importante. Es cuestión de tiempo que sea también la parte física.

      Un abrazote!!!

      Responder
  5. Tienes más razón que un santo. Eres un jodido filósofo del siglo XXI (¿Estamos en el XXI verdad? El tiempo pasa demasiado deprisa…). Algún día se estudiará la cultura viahippie en los coles y podré decir con orgullo a mis nietos o a mis gatos, que conocí al precursor de esta teoría, momentos antes de que me metan en una residencia.
    Un fuerte abrazo crack

    Responder
    • jajajja, que bobo, si estamos en el XIX… no hay más que ver los debates políticos…

      Me conformo conque tu te unas de lleno al movimiento 🙂

      Un abrazote!!

      Responder
  6. Que bien expresado todo Dani!!
    Siempre le he dado vueltas a la idea de que cosas tan sencillas como la hospitalidad y los viajes lentos son actos de profunda rebeldía.
    Que bonito ver que cada vez más gente se une a esto de Viahippiar.

    Un beso de parte de Almu, Miguel y la hamaca que está recorriendo USA 🙂

    Responder
    • jajajjajaja, que cariño os tengo, sobre todo a la hamaca!

      Me alegra mogollón leer a una viahippie en pleno proceso de viahippismo!!!

      Un abrazote a los tres!!

      Responder
  7. Interesante… No sé si soy más hippie o más viahippie, tendré que seguir viajando para averiguarlo.Qué bonito rodearse de gente que cree que el mundo puede ser un lugar más tolerante. ¡A seguir viahippiando, pues! Por cierto, a mí me encanta nadar a contracorriente, el otro día leí en algún sitio que «solo los peces muertos nadan a favor de la corriente». Nada más que añadir =D

    Responder
    • jejejej, que graaan frase, mi hippie o viahippie amiga.

      En cualquier caso, lo que tenemos claro es que había que tomar una decisión… y se tomó.

      Hecho eso, las cosas son distintas

      Responder
  8. Gracias por mencionarme Dani, lo cierto es que siempre he dicho que alguien que viaja con tarjeta de crédito no puede llamarse hippie ni aventurero, calificativos que me han endosado en entrevistas, a lo que yo respondía que lo mío es viajar para vivir, sin metas ni objetivos, pero viendo que unos cuantos comenzamos este estilo de vida allá por el cambio de siglo, probablemente si podamos hablar de un cambio de cultura más que de contracultura, porque una de las cosas que he aprendido viajando es que estar contra aporta poco, mejor trabajar por las cosas que estás a favor

    Responder
    • jeje, el sufijo hippie que le he puesto no hace referencia al viajar en modo hippie, más por la similitud con los movimientos de contracultura. Que se viaje con tarjeta o sin ella no es el caso, sino la decisión de salirse de lo estipulado para convertir la vida en otra cosa, en este caso centrada en viajes. Muy interesante tu observación de contra y a favor, ciertamente yo pienso igual en ese sentido, mejor construir a favor. «Contra» lo utilizo como forma de constatar un movimiento con un planteamiento diferente para enfocar la vida.

      Un abrazo Carlos!

      Responder
  9. La vida y el arte avanzan en movimientos pendulares que compensan los excesos. El viaje es muchas cosas, también contracultura si así lo vives. Este tema da para mucho. Gracias por introducir un poco de debate y ¡Por pensar en nosotros! Llega un día que piensas, ahora toca viajar, y, entonces, el mundo deja de ser aquello que creías que era… Un abrazo!

    Responder
    • Jejeje, ¿se nota que me encantan los debates (con tema interesante)? Sí, al escribirla también me daba cuenta de elementos que conviven fuera de ese término contracultura que he utilizado. Pero sin duda depende de cómo lo vivas.

      Y desde luego, pensar «ahora toca viajar» es un movimiento que, al menos, rompe moldes.

      Un abrazote!!

      Responder
  10. Gracias por la mención! Ciertamente Kerouac fue una de mis inspiraciones para viajar, las generaciones se van conectando unas con otras y dejando postas. Vamos a ver como se inscribe el nomadismo en el imaginario colectivo de las próximas generaciones. Buenos caminos! Un abrazo desde Yibuti!

    Responder
    • Qué bueno leerte por aquí, Juan Pablo! Fue pensar en Kerouac y conectar mentalmente con tu historia viajera, jeje. Desde luego que ya se van quedando sedimentos del nomadismo iniciado por varios que andáis «on the road» desde hace años, publicando libros y contando experiencias de forma artística. Kerouac no sabía que iniciaría lo que ahora vemos que es la generación beat cuando decidió vivir como lo hacía. Simplemente lo hizo, se puso a vivir como quería. El resto llegó solo.

      Un abrazo a los dos!!

      Responder
  11. Dani que gran artículo y que bien escrito está, dicho esto gracias por nombrarnos pero todavía no nos vemos a nosotros mismos así, pero estamos en camino de saber que lugar ocupamos! Pero lo importante es que la decisión tomada sea propia y no intentar ser algo que no eres. Un abrazo de los tres Daniel!!!

    Responder
    • Hola Miguel! La verdad es que vosotros habéis tomado un camino con muuucha decisión y sea lo que sea, va a traer cosas apasionantes. Y eso es lo que realmente importa, sin apelativos 🙂

      Responder
  12. Dani, como siempre con tu gran sentido del humor y tu filosofía viajera. Gracias por nombrarme. Voy a contar mi cambio de ejecutivo a «protoviahippie», mis «35 años de viajes por Asia» y presentar mi novela que habla de ello, aparte de amores, aventuras y tragedias por el Himalaya, el próximo martes 21/06 a las 19 horas en Bthetravelbrand:

    Responder
    • jajajja, grande, Francisco. Ese día me pillas en road trip por tierras zamoranas en busca de un oficio artesano en vías de extinción.

      Responder
  13. ¡Vaya honor ser mencionados por aquí!
    Como hemos dicho muchas veces no sabemos si esto es un paréntesis o nuestra nueva forma de vida, pero sólo el intentarlo estamos seguros de que marcará un antes y un después a todos los niveles.
    La verdad es que me parece muy muy interesante lo que planteas, ¿será que esto empieza a ser un movimiento cada vez más grande? El tiempo dirá y ahí estaremos para verlo juntos 🙂 ¡Un abrazo!

    Responder
    • jeje, el honor que tiene el mundo de poder ser recorrido y filmado por vosotros.

      Esperemos que este movimiento cada vez mayor se convierta en algo que insufle cambios más importantes en la gente.

      Responder
    • Jajajajjaa, que grande Julia. La verdad es que si el mundo funcionase de otra forma… eso no sería un problema especialmente relevante.

      Un abrazote!!!

      Responder
  14. Qué curioso me ha resultado encontrar mi nombre y el de Itziar aquí, nunca pensé en la dimensión contracultural que dices, y lo cierto es que me gusta el término que cada vez aglutina a más amigos viajeros. Esto ha venido para quedarse, como vemos cada año en las Jornadas de los grandes viajes.
    Preguntas por otros viajeros y sin duda vienen a mi mente Xavi y Carme (lavueltaalmundo.net). O Dani Serralta. O el Kapitan Pedales, que en los 90 dio la vuelta al mundo por amor al viaje. Hay más, por suerte, muchos anónimos que hemos hecho del viaje una herramienta de transformación personal y social.
    Gracias por tu reflexión.

    Responder
    • Tu nombre y el de Itziar deben estar sí o sí, jeje. En cuanto a Xavi y Carme, qué olvido más tonto! Tenía pensado incluirlos y al final se me pasó completamente!!.

      Personalmente, espero que sigamos siendo más los que encontremos en el viaje esa herramienta de transformación.

      Un abrazo Pablo!!

      Responder
  15. Muy interesante artículo. La verdad es que os admiro, creo que hace falta mucha determinación para vivir viajando como viajáis. De momento yo trabajo para viajar, y escribo de vez en cuando 😉

    Responder
    • Hola Manu! Gracias por dedicarle un poco de tiempo a leer mis locas reflexiones viajeras. Yo voy intentando, lo más que puedo, estar viviendo y viajando, manteniendo ambas en una cooperación constante. Es, de momento, lo que más me incentiva la creatividad.

      Un abrazote!!!

      Responder
  16. Buen post inacabado, y que dá lugar a muchos finales y a muchas respuestas.
    Cada cual tiene sus razones para salir de su pais y viajar, ya sea conociendo y explorando, ya sea trabajando, ya sea una convinación de ambas.
    Lo que ha posibilitado este surgimiento del «viahippie» (concepto supongo de tu propio cuño) o al menos su conocimiento (pues ya en los 60s, 70s, 80s.. habia jovenes incluso mas alocados que en camión o en carpa recorrian el mundo, eso si, en grupo) ha sido el surgimiento de internet con sus emails, webs de información gratuita, mapas y ahora la posibilidad de poder crear tu blog (a falta de webs gratuitas) que surgieron como meros diarios online donde escribir y poner fotos.
    Yo en 2001 ya hice mi primera web de fotos de Laos en geocities: ofrecia muy pocos megas y tuve que ingeniarlas para que todo cupiera.
    Las nuevas webs para comprar vuelos cada vez mas baratos (en el 2000 todavia se vendian solo via agencias y no en la compañia), de reserva efectiva de alojamientos (cada ano mas caros y lo que va a acabar con el viahippie), la enorme (y excesiva) info disponible, los foros en deshuso cambiados a los grupos facebook…
    Viajar «solo» en 2000 aún era temerario. En 2016 parece lo normal.
    Respecto a la existencia de «comunidad viajera», siento decir que cada vez es menor. La solidaridad entre viajeros hasta la llegada de internet masivo e emails era muy superior: la necesidad de hacerse con informacion fresca, o la necesidad de alejarse de la soledad y compartir mesa o un té, hacian de los viajeros una hermandad mucho más real que ahora (donde prima el egoismo).
    Una excepcion pueden ser los israelies o los argentinos, con un sentido de la familia y un hermanamiento que envidio positivamente.
    Los demás viajeros están más deshunidos que nunca, menos dispuestos a abrirse y hacer amistad con viajeros extraños, y mas volcados en pasar las horas delante de un movil u ordenador mientras viajan. Solo les preocupa si su alojamiento tiene wifi y poco mas.
    Webs como couchsurf o wooff u otras nuevas (si sabes más ponlas porfavor) son un gran alivio refrescante de oportunidades frente a la nueva oleada de webs «viajeroconsumista» que empiezan a desbordarnos.
    Lo cierto es que a pesar de los vuelos baratos, viajar nunca habia sido tan caro como ahora.
    En los 90s existia la red REAJ de YOUTH HOSTELS mundial que cada pais subvencionaba. Eran albergues con habitaciones y dormitorios con unos precios subvencionados para jovenes y estudiantes. En Europa en el 1990 los jovenes estudiantes (los que nos enterabamos por amigos) nos lanzabamos un mes de interail (150$ para trenes 1 mes todo europa) y dormiamos en estos albergues subvencionados de 2 a 4$ la cama y noche, con cocinas, nevera, duchas, biblioteca, tv… (Londres o Paris subian a 6-8$).
    Ahora son privados y cuestan de 12 a 30$ por un camastro en dormitorio. Una auténtica barbaridad.
    Anyway, felicidades por el post y a seguir ayudandonos en nuestros viajes.

    Responder
    • ¡Hola César!
      Bueno, es un placer leer comentarios como los tuyos, porque aportan y dan un punto de vista muy amplio de lo que sucede. Se nota tu veteranía ya solo con leer la forma en la que te expresas.

      Hay cosas de las que has dicho que, efectivamente, también me estoy dando cuenta y que hacen que dentro del término «viahippies» quizá no pueda entrar todo el que viaja. Una de ellas es esa presencia del viajero «autista», que solo quieres su smartphone y su portátil para comunicarse en vez de aprovechar y hablar con ese israelí o alemán o indio o esa italiana o australiana o camboyana que tiene a escasos metros. Yo cuando viajo, me intento sumergir a fondo, por ello uso couchsurfing o, simplemente, el hablarhastaconlaspiedras. Pero he de entonar un mea culpa porque a veces, debido a la presencia de mi blog, si que voy buscando ese wifi que me permita editar la siguiente entrada y las fotos que he hecho. Sí, ahí me convierto en algo más autista (breves momentos, pero los hay).

      Lo de los REAJ es totalmente cierto. Yo empecé a usarlos también a principios de los 2000 y desde entonces hasta ahora el cambio de precio ha sido brutal…

      El costo en unos sentidos se ha encarecido, desde luego, en otros sí que he visto que se ha ganado, por ejemplo con redes como couchsurfing o nightswapping (esa es otra web similar). A parte, también depende de cómo viaje cada uno. Yo uso muucho medio de transporte pero también autostop y, por conversar con cualquier persona, acabo siendo alojado en muchos sitios (sin pedirlo 🙂 ).

      El término viahippie lo empleé para el perfil de viajeros que, a parte de haber decidido dar un cambio de vida, también tienen en cuenta a los otros viajeros. En los círculos que me muevo sigo viendo comunidad y compañerismo, pero si que es cierto que debe haberse reducido a lo que era antes.

      En cualquier caso, ahí estamos, para viajar y ayudar a los que lo necesiten.

      Un abrazo y muchísimas gracias por dejar tu comentario, de verdad.

      Responder
  17. Hola Dani,
    Una de las cosas que más me alucina de nuestros años en la ruta es esta influencia inconsciente en la vida de desconocidos. Cómo solamente por comunicar, o compartir, o por lanzarnos a por lo que nos apasiona, llegamos a contagiar estas ganas de entender el mundo y de vivir más intensamente. En realidad cada cual tiene su objetivo, pero, sabes, ¡es posible!, eso es lo que decimos todos los que aparecemos en tu lista con nuestros actos. Y eso jamás dejará de maravillarme.
    Ahí van un par de protoviajeros: el suizo Claude ‘Yak’ Marthaler, en bici desde 1995, aprox. Ted Simon, inglés, en moto desde los 70…

    Responder
    • Jeje, qué gran reflexión, Pablo. Ciertamente es una gozada, desde este lado, el poder tener referentes en los que afianzar ese «quiero… PUEDO» que se siente dentro pero da algo de miedo sacar. En mi cortito período escribiendo sobre mis viajes de forma pública he recibido alguna que otra de esos comentarios donde, esta vez, soy yo el que ha influído… y la sensación es muy bonita, ciertamente.

      Muchas gracias por comentar, por inspirar y por aportar. Espero nos crucemos con el viento en el futuro, sea en Barcelona o en Idaho.
      Un abrazo!

      Responder
  18. Que bueno!!!! Por suerte cada vez somos más los «raros» que decidimos precisamente eso: Que no haya lunes. De hecho, no hay cosa mejor que levantarse y decir. Donde estamos? Que dia es hoy?! Genial!!! Me encanta! Un abrazo gigante de otro par de aventureros que hace 4 años que estamos en ruta por sudamérica con nuestra furgo! Salud!!!! 😀

    Responder
    • Hola Marta!!
      Muchas gracias por escribir y un placer conoceros, chicos. He estado echando un vistazo y me encanta vuestro viaje en capítulos. Qué trabajazo!! Es un placer encontrarme con más «raros» de los que queremos dedicarle más tiempo a disfrutar de lo que nos gusta, en este caso viajar. A ver si podemos vernos en algún giro de los viajes (es posible que para fin de año marche un tiempo por sudamérica, de Paraguay hacia el sur quizá, pero no sé aun).

      Un abrazote!!

      Responder

Deja un comentario