India contada a un niño
Días antes de empezar mi viaje, Gary y Holly, los muñecos que tenían mis sobrinos en casa, desaparecieron de repente… ¿¿Qué ocurrió con ellos?? ¡¡Algo
"El arte y el viaje inventan una forma de ver el mundo"
Esta es la parte donde pondré mis ideas, propuestas y experimentos creativos viajeros: ¿quién sabe? quizá museos urbanos, juegos de pistas viajeros, viajes cantados, lugares reinventados, formas alternativas de explorar un lugar… Es la parte más espontánea, mágica e impredecible del Viaje… por eso quizá es mi preferida.
Días antes de empezar mi viaje, Gary y Holly, los muñecos que tenían mis sobrinos en casa, desaparecieron de repente… ¿¿Qué ocurrió con ellos?? ¡¡Algo
Mis ojos se abren. Los rayos de la primera luz del sol se cuelan por la ventana. Los destellos de la pesadilla que me ha
El viajero que llega a Agra ignora que está llegando a la ciudad más bella del planeta. Desde el primer momento en que unos ojos
¿Qué se oculta detrás de cada una de estas caras? Pues 6 bloggers mostrando sus caras en diferentes situaciones durante alguno de sus viajes. Este es, efectivamente,
«Nunca hacer el chorra fue tan divertido…» estaba yo escribiendo como colofón en mi vídeo de presentación del Viaje Creativo cuando, de repente, los chicos
Te voy a mostrar 8 propuestas con varios «juegos» dentro de cada una para conseguir un «viaje divertido». La esencia está en añadirle una pequeña pincelada,
Se pueden hacer muchas cosas con las calles de Madrid: pasearlas, mirarlas, ensuciarlas, corretearlas, patinarlas…y cocinarlas. Voy a utilizar 5 calles madrileñas para elaborar una
El fotógrafo programado es la primera entrada del «Viajero Creativo», sección donde el viaje se convierte en experimento e imaginación. En la fotografía programada no tienes control
ATENCIÓN: Esta entrada tiene banda sonora que dura (más o menos) el tiempo de su lectura. Dale al play y comienza a leer el post
Esa tarde, Tinghir se veía poderosamente naranja en contraste con el gigantesco palmeral, el cual la atravesaba en dos como una verde y brillante ría.
Ahora ya lo sabíamos: lo que estábamos buscando no se encontraba en Ait Benhaddou. La mirada de Juan se perdía en el horizonte, desde el
“Iréis a Marruecos, a Marrakech y lo encontraréis cuando él quiera ser encontrado.” Las palabras del amigo de Juan no podrían haber sido menos esclarecedoras.